lunes, 4 de noviembre de 2013

Centro de Día en Brandsen recibe más apoyo

Les compartimos que el Centro de Día de la comunidad Reformada en Brandsen sigue recibiendo la colaboración solidaria de diversos sectores de la sociedad.

En esta ocasión, Claudio Wilgenhoff nos envía una foto del encuentro donde "nos dieron simbólicamente el cheque para el centro de día. Allí estamos Patricia y yo (el que está de corbata aunque no lo crean) (también nos acompañó Titi) junto a todos los directores del grupo PSA." "Les comentamos la historia y trayectoria de nuestra iglesia desde sus inicios en Argentina, sus tareas evangélicas y diacónicas", sigue diciendo Claudio. "Y el entusiasmo por el centro de día."

Finalmente nos escribe que "damos muchísimas gracias a nuestro Dios porque desde este lugar tan pequeño, se manifiesta con toda su grandeza y lo hace con aquellos que más lo necesitan".

Desde este espacio nos unimos a la gratitud a Dios y saludamos a la comunidad en Brandsen.

Siete semanas por la evangelización

La Junta Directiva de las IRA, a partir de una propuesta del equipo de evangelización, comparte la siguiente propuesta de acción concreta para los meses de octubre y noviembre de 2013: dedicar siete semanas (número de fuerte simbolismo en la Biblia) a la oración en el seno de nuestras comunidades para concluir el 1º domingo de adviento con una liturgia especial de evangelización y misión. Cada una de esas semanas se enviará un recurso litúrgico para compartir durante el culto (podrá ser una oración, un poema, una canción, una breve reflexión, un testimonio o historia de vida, etc.). Y el 1º domingo de adviento, la liturgia completa, que cada congregación podrá adaptar de acuerdo a su propio contexto, recursos y necesidades. Pero, repetimos, la finalidad es estar todos unidos como Iglesias Reformadas, aún en la distancia. Durante estas semanas previas se invita también a orar por personas concretas que quisiéramos que compartieran la experiencia de la vida en comunidad con nosotros: amigos, vecinos, compañeros de trabajo, etc., a quienes se invitará a participar del culto del primer domingo de Adviento. Donde sea posible, se invita a acompañar estas siete semanas con algún evento público en cercanías del templo. Puede ser una actividad recreativa en una plaza, un concierto al aire libre, una caminata por el barrio o lo que creativamente surja en cada lugar.


La celebración de las siete semanas iniciaría el domingo 20 de octubre y concluiría el domingo 1 de diciembre. Y el lema sugerido para este tiempo es: “Dios camina a nuestro lado, cada día nos acompaña”.

Esta es la oración de dedicación que se propone para iniciar la experiencia.

“Dios camina a nuestro lado, cada día nos acompaña”

Oración de dedicación de las siete semanas

Dios bueno y fiel, te damos gracias por habernos regalado en Jesús
la buena noticia de una vida que vale la pena, de una vida plena y abundante.

Gracias por caminar a nuestro lado, porque cada día nos acompañas.

Te agradecemos por el privilegio de poder celebrar libremente nuestra fe
y por poder compartir sin impedimentos el mensaje liberador de Jesús.

Gracias por caminar a nuestro lado, porque cada día nos acompañas.

Reconocemos nuestra tibieza en ser luz y en ser sal en la vida cotidiana,
pero te alabamos porque vuelves a confiarnos la tarea de anunciar
las maravillas de Jesús con nuestras familias, con nuestros amigos, con nuestros vecinos,
con toda persona que necesite ser tocada por tu gracia renovadora.

Gracias por caminar a nuestro lado, porque cada día nos acompañas.

Como comunidades de fe en esta tierra que nos diste por casa,
nos unimos en estas semanas para trabajar por la extensión de tu Reino
de amor, de paz, de justicia, de plenitud, de solidaridad, de vida abundante.
Queremos dedicarte esta experiencia, nuestro tiempo y nuestras vidas para que,
acompañados y sostenidos por tu Espíritu Santo, el Evangelio restaurador de Jesús
pueda ser conocido por personas que aún no lo conocen y no lo han experimentado.

Gracias por caminar a nuestro lado, porque cada día nos acompañas.

Te pedimos que nos animes en este lindo desafío al que nos llamas.
Que en estas semanas podamos sentirnos parte de un cuerpo sólido y unido,
en diferentes ciudades y contextos, en nuestras ricas diversidades;
que podamos también fortalecer los vínculos y los afectos a nivel local;
que nuestra espiritualidad personal sea renovada y fortalecida,
y que nuestra fe brille con un nuevo resplandor
para tu sola gloria y para que el mundo crea.

Gracias por caminar a nuestro lado, porque cada día nos acompañas. Amén.